13 noviembre 2008

Tan cerca pero tan lejos


Ella estaba allí, ¡tan cerca!, con su voz melosa, cautivadora.
Me pareció algo diferente. Más distante.
Ni un solo gesto, ni un cruzar azaroso de miradas.
Es como si tuviéramos un acuerdo
tácito para ignorarnos.
Para no lastimarnos.


Inquieto y dolorido por la dicha de volver a verla.
Si me atreviera iría a decirle que ella invade aún,
todos mis sueños.
Pero yo sé de su rechazo y me retraigo.


Hoy he visto su felicidad, como entregaba ternura.
Te pido, que no la hagas nunca llorar.
Ella mira a la vida, con ojos de bailarina.

03 noviembre 2008

Perdido en ninguna parte






Aprendo a convivir al lado del vacío, y aunque
puedo fingir que nada ha cambiado, sé
que ya todo no será igual.
Extraño demasiadas ausencias.


Cada vez que me adentro en la ciudad
a buscar el contacto con el mundo, a mitigar
los daños del alma, en busca de mí mismo, sólo
encuentro corazones impasibles,
cercados con alambres de espino.


Nada me retiene aquí, así
que regreso a otros lugares imaginarios
donde espera el olvido.
Lugares que me llevan a reconciliarme
con la soledad.

01 noviembre 2008

Ni una única manera, ni un único camino


Todos los años coincidiendo con el cambio estacional del invierno a primavera, las violetas brotan rutilantes al borde de los caminos. Sus flores son intensamente aromáticas, aunque cada caminante percibe la fragancia y su belleza de manera diferente. Y sin embargo, ninguna sensación experimentada es más autentica o verdadera que la otra. Simplemente cada uno lo siente de una manera propia.

Nadie tiene derechos de propiedad sobre la verdad. La verdad crece en nuestro interior y por lo tanto es ahí donde debemos buscarla.

Debo dejar de dar paseos entre la hojarasca del otoño. Me contagia pensamientos que parecen acercarse algo, a cuestiones transcendentales.